La enfermedad de Parkinson (EP) es una enfermedad del movimiento que afecta a personas de todas las edades. Se produce cuando las células nerviosas (neuronas) del cerebro no crean suficiente dopamina, un neurotransmisor crucial. Aunque algunos casos parecen ser genéticos, pero la mayoría no parecen ser hereditarios.
El temblor en reposo es uno de los síntomas asociados a esta enfermedad. Los enfermos de Parkinson pueden tener problemas para caminar, realizar tareas sencillas, masticar, tragar, hablar o dormir a medida que avanza la enfermedad.
La EP es la segunda dolencia neurológica crónica más prevalente en personas mayores de 50 años, pero también puede afectar a personas más jóvenes. Aunque se desconoce el número concreto de enfermos de Parkinson en México, el Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía estima que cada año se diagnostican 50 nuevos casos por cada 100.000 personas. Además, aproximadamente diez millones de personas en todo el mundo padecen la enfermedad de Parkinson.
No existe una prueba única que pueda determinar si alguien tiene o no la enfermedad de Parkinson. Por ello, diagnosticarla puede ser un reto. De acuerdo con Boehringer Click, un neurólogo especializado en trastornos del movimiento, está capacitado para hacer una valoración por medio de un examen neurológico y la descripción de los síntomas del paciente.
